Crecer, intentar mejorar y no ser capaz de conseguirlo, caminar hacia delante sin pararte a mirar el camino recorrido, correr con los ojos cerrados y el pelo al viento, despreocuparse de los problemas menos importantes y de los importantes también, correr sin importar donde ir ni dirección que tomar, seguir caminando a pesar de que delante hay un precipicio lleno de dudas y confusiones... Vive sin pensar en el mañana, disfruta como si no hubiera un mañana.
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